Con los nombramientos recientes de Andrés Vázquez y José Velis en la Agencia de Regulación y Control Aduanero (ARCA), el Gobierno avanza en su plan de reducir personal y reestructurar el ente recaudador. La llegada de ambos busca frenar la escalada de protestas que se anticipa en los próximos días.
Con la promesa de reducir 3155 empleos en la actual plantilla de unos 22.200 trabajadores, el Gobierno oficializó la disolución de la AFIP y la creación de la ARCA, bajo la dirección de Vázquez en Aduanas y Velis en el área impositiva. La medida generó una serie de protestas de los gremios del organismo, y el primer paro general está previsto para el 30 de octubre.
En la Casa Rosada sostienen que “no les preocupa” la presión de los gremios y confían en la capacidad de los nuevos directores para gestionar el conflicto. Cerca del presidente, se percibe como crítica la situación en Aduanas, un área que Vázquez conoce desde hace años. Desde el oficialismo insisten en que se buscará “jugar con otras reglas”, aludiendo a la opacidad que históricamente rodea a la Aduana.
Resistencia y acciones gremiales
Los gremios que representan a los empleados de ARCA iniciaron medidas de fuerza el miércoles pasado. Las actividades se suspendieron por dos horas cada día y se implementó un “apagón informático” en todas las sucursales. Esta situación podría escalar en las próximas semanas, y se espera que los sindicatos intensifiquen las protestas.
Sin embargo, en el entorno libertario afirman que no están dispuestos a ceder. Según funcionarios, Vázquez es el hombre ideal para lidiar con estos desafíos, dado su conocimiento de la institución y los años de relación con el personal. La medida de pasar a disponibilidad a 3155 empleados, anunciada por el vocero Manuel Adorni, afecta en particular al personal contratado en el último año del gobierno de Alberto Fernández.
El pasado de Vázquez también genera controversia. Con experiencia en operativos de gran escala, fue un nombre relevante en el organismo tributario desde hace más de 25 años. Su historial incluye la supervisión de actividades de figuras como Cristóbal López y Lázaro Báez, y su rol en un operativo de la AFIP contra el Grupo Clarín en 2009. También fue cuestionado en 2010, tras revelarse que poseía cuentas no declaradas en el exterior.
Confianza en la nueva estructura
Para el Gobierno, la elección de Vázquez y Velis apunta a reforzar el control y la seguridad en Aduanas, que maneja información delicada. Aun así, algunos empleados históricos expresan que esta reestructuración tiene el objetivo de “ampliar la presencia de los servicios” y que la decisión no necesariamente traerá cambios inmediatos en el funcionamiento diario.
Desde ARCA, las fuentes aclaran que la reestructuración se encuentra en una fase inicial y que, aunque el impacto fue rápido, no hay aún un plan formal que regule el proceso de reducción de personal. En la Casa Rosada, consideran que el cambio es clave para dar lugar a un nuevo enfoque de gestión y enfrentar los problemas del organismo.