Las palabras "por qué", "porque" y "porqué" tienen usos específicos en nuestro
idioma. A continuación te vamos a contar cuándo y cómo usar cada una, con
ejemplos para que quede claro.
Desvelando cómo se escriben correctamente las conjugaciones del 'Porque' (iStock)
Empecemos con "por qué", separado y con tilde
La usamos para hacer preguntas o para introducir una pregunta indirecta, como
cuando queremos saber el motivo de algo. Por ejemplo, "¿Por qué llegaste
tarde?" o "No entiendo por qué llegaste tarde".
Después está "porque", junto y sin tilde
Esta palabra la usamos para dar una razón o explicación, como el "because" en
inglés. Por ejemplo, "Llegué tarde porque el tráfico estaba muy pesado".
Por último, está "porqué", junto y con tilde
Se usa como un sustantivo, refiriéndose a la razón o motivo de algo. Por
ejemplo, "No entiendo el porqué de su comportamiento".
Sobre el origen de estas palabras.
"Por qué" y "porque" vienen del latín vulgar "propter quid", que significa
"por qué" o "por la razón de qué". Mientras que "porqué" deriva del latín
"causa", que significa "causa" o "motivo". Es importante tener presente estas
diferencias y usar las palabras adecuadas según el contexto para comunicarse
con precisión en español.
Una de las conjunciones más comunes en nuestro idioma es "porque". La Real
Academia Española nos dice que al tratarse de una conjunción átona, no lleva
tilde. Su función principal es introducir oraciones que explican la causa de
algo. Podemos sustituirla por expresiones como "puesto que" o "ya que", como
en este ejemplo: "No fui a la cena porque no tenía hambre", que también podría
decirse: "No fui a la cena ya que no tenía hambre".
Además, "porque" se utiliza para responder preguntas que empiezan con "por
qué". Por ejemplo: —¿Por qué no viniste? —Porque no tenía hambre. También
podemos emplear "porque" como conjunción final, seguida de un verbo en
subjuntivo, con el mismo sentido que "para que".
Aunque lo más recomendable es usar una sola palabra, se admite la grafía "por
que". Por ejemplo: "Hice cuanto pude porque no caminara así", o también "Hice
cuanto pude por que no caminara así".