La relativa calma en el mercado cambiario podría verse afectada por la nueva
política del Banco Central
La relativa estabilidad en el mercado cambiario es un respiro para el Gobierno, especialmente para el ministro de Economía y candidato a presidente, Sergio Massa.
Sin embargo, persiste una tensión latente y cualquier error podría provocar un
aumento prematuro en las cotizaciones. El efecto inmediato a seguir será la
reacción después de que se publique el primer dato de inflación a nivel
nacional, a partir de mañana.
Si bien hay opiniones divididas entre los operadores e inversores, algunos
descartan cambios adicionales en la tasa de interés debido a que el nivel
actual ya es lo suficientemente alto, mientras que otros sugieren que mantener
la tasa sin cambios podría poner en riesgo la frágil estabilidad alcanzada y
provocar una nueva brecha en el mercado cambiario.
A fin de mes, llegará el vencimiento de la última versión del dólar soja 4, lo
que resultará en una disminución en la oferta de divisas durante el mes de las
elecciones. Esto generará una mayor presión en el mercado cambiario.
Este impacto se sentirá no solo en el mercado de cambios oficial, donde el
Banco Central ha estado adquiriendo divisas de manera continua durante 20 días
gracias a mayores liquidaciones del sector agropecuario, sino también en el
segmento financiero, donde los exportadores tienen permitido liquidar hasta el
25% de sus ventas.