El seleccionado nacional enfrentó a Panamá este jueves en el Estadio Mas Monumental, de River Plate y ganó 2 a 0 en un partido lleno de polémica
La Selección enfrentó este jueves a Panamá desde las 20.30 horas en el Estadio Mas Monumental de River Plate.
La jornada fue toda una fiesta dentro del estadio para recibir al equipo Campeón del Mundo que dirige Lionel Scaloni. Fue el primer partido tras obtener el título mundial.
El encuentro fue televisado la TV Pública. Lionel Messi comenzó como titular desde el arranque.
A la Argentina le costó desde el arranque del partido. Fue como si se tratara de un partido de cuartos de final de la Copa Mundial, Panamá fue dese el minuto uno a defenderse y jugar brusco para conseguir ventaja, que no pudo conseguir.
Ante una multitud en un estadio colmado, los 11 titulares y campeones mundiales, ya que Scaloni repitió el mismo equipo de la final de la Copa del Mundo, la noche fue una fiesta que terminó en un evento deportivo que quedará en la memoria de todos los argentinos.
Con goles de Thiago Almada a los 78 minutos y con un golazo de Messi al ángulo a los 89 minutos, Argentina se impuso frente a Panamá en un partido lleno de faltas y ventajas para el seleccionado nacional, donde tuvo que haber tenido al menos dos penales a favor, y no los tuvo por decisión del árbitro.
A la Argentina le costó desde el arranque del partido. Fue como si se tratara de un partido de cuartos de final de la Copa Mundial, Panamá fue dese el minuto uno a defenderse y jugar brusco para conseguir ventaja, que no pudo conseguir.
Ante una multitud en un estadio colmado, los 11 titulares y campeones mundiales, ya que Scaloni repitió el mismo equipo de la final de la Copa del Mundo, la noche fue una fiesta que terminó en un evento deportivo que quedará en la memoria de todos los argentinos.
Con goles de Thiago Almada a los 78 minutos y con un golazo de Messi al ángulo a los 89 minutos, Argentina se impuso frente a Panamá en un partido lleno de faltas y ventajas para el seleccionado nacional, donde tuvo que haber tenido al menos dos penales a favor, y no los tuvo por decisión del árbitro.